Siguendo en la onda Chiquinquireña, hoy les comparto parte de las ofrendas que se entregaron ayer y una muy especial pero a la inversa, un regalo de ella para mi. Por cosas de ella, llegue a la Basilica muy temprano y pude estar en sitios insospechados por mi, y entre otros estuve en la cocina de Chinca y vivir parte de ese corre corre que se vive dentro, les dejo la foto. Les muestro Platanos, Topochos, Lechozas, Chirimoyas y Naranjas, Panes; posiblemente fueron cinco, y peces, esos si fueron dos. Dos Chinas, una en La ensenada y otra en el Corazon de Maracaibo. Dos Experiencias y la unidad en el retribuirle lo que ha hecho por nosotros. La abundancia es algo a lo que tenemos derecho todos los seres humanos solo por ser seres humanos hijos de un Padre bueno y en ese sentido ayer vivi abundancia de alimentos, de solidaridad, de fraternidad, y sobretodo de amor. En medio de estas ofrendas y del fervor Mariano me entere que nos habia dejado la sencilla y humilde Maria, la de Angel Lozano. Enterarme anoche despues de esa hermosa experiencia en San Juan de Dios me invito a elevar una oracion por ella, una cocinera que asi como Maria de Chiquinquira se hizo siempre la mas pequeña para ser la mas grande. Entonces entiendo que tambien ella fue ofrenda. Hoy nos toca continuar desde la belleza de su trabajo siempre silente pero oportuno. Maria Gracias por tu ejemplo mujer. Y a ti Mi Reina Morena, simplemente Gracias.
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